Esta pequeña localidad logró un equilibrio entre el crecimiento y la preservación de la esencia del pueblo. La planificación urbana y la colaboración entre lo público y lo privado fueron claves para el éxito.
Ybarlucea, un pequeño pueblo con una gran visión experimentó en los últimos años un crecimiento exponencial, pero manteniendo su encanto y tranquilidad característicos. A pesar de su proximidad a la ciudad de Rosario, Ybarlucea logró planificar su desarrollo de manera que su infraestructura y servicios se expandan sin perder la esencia de una urbe pequeña, pero que, además, apuesta al desarrollo deportivo y educativo de sus habitantes.
Desde 2015, la comuna trabajó arduamente para generar un plan urbano local, conocido como “Ybarlucea 2030”, que entró en vigor tras dos años de paralización de desarrollos. Este plan no solo fomentó la inversión y la confianza, sino que también promovió un mecanismo de intensa colaboración entre el sector público y privado, dando lugar a un crecimiento ordenado y sostenible.
El enfoque de Ybarlucea en la educación y el deporte fue fundamental para su desarrollo. Algunos de los sectores urbanizados, que tienen restricciones para la vivienda permanente, se optimizaron para actividades deportivas y educativas. Esto permitió que los clubes de Rosario consideren extender su alcance a Ybarlucea, aprovechando la oportunidad de adquirir terrenos a precios accesibles y expandirse con calidad y servicios mejorados.