El acto tuvo lugar esta mañana en el Campo de la Gloria frente a soldados, cadetes militares y de la Policía provincial. “Sin patria, no le dejamos destino a nuestros hijos», expresó el intendente Leonardo Raimundo.
En el histórico Campo de la Gloria, de la ciudad de San Lorenzo, se realizó este jueves por la mañana un imponente acto en conmemoración del Día de la Bandera que incluyó izamiento, desfile, salva de fusilería y jura de la enseña patria.
El emotivo acto fue encabezado por el intendente, Leonardo Raimundo, junto con autoridades locales, policiales y militares.
La jornada se inició con el izamiento de la bandera en el Pórtico de la Gloria, el escenario donde el general San Martín libró el único combate en suelo argentino hace más de 200 años. Luego, se abrió paso al desfile militar a lo largo del bulevar Sargento Cabral con la participación de soldados y cadetes de 6º año del Liceo Aeronáutico Militar de Funes, soldados voluntarios, efectivos del Batallón de Apoyo Logístico San Lorenzo del Ejército Argentino y cadetes del Instituto de Seguridad Pública de Santa Fe y de la Policía Comunitaria de Rosario.
En el momento más emotivo de la mañana, el jefe de la Guarnición Aérea Rosario y director del Liceo Aeronáutico Militar, comodoro Carlos Alberto Chanda, preguntó: “¿Juráis a la patria servir constantemente a su bandera y defenderla hasta perder la vida?”. El estruendoso “¡sí, juro!” provocó que a más de uno se le pusiera la piel de gallina por la emoción.
El único orador de la jornada, el intendente Raimundo, ofreció un discurso conciliador en momentos de divisiones: “Sin el concepto de patria, un país es simplemente un puñado de provincias, una población sin destino. Sin patria, no le dejamos destino a nuestros hijos. Sin bandera no hay futuro para la Argentina. Sin bandera vamos a seguir viviendo con divisiones absurdas que no conducen a ningún lado. Como vecino de San Lorenzo y representante de mi pueblo, es un orgullo tenerlos a todos ustedes hoy aquí”.
Instantes después, una salva de fusilería puso punto final al acto con el que San Lorenzo rindió tributo a la bandera y a su creador.