Lo mismo sufrieron cuatro empresas que también se encuentran establecidos en el área industrial de esta ciudad cabecera del departamento Caseros
El centro de entrenamiento que los bomberos voluntarios de Casilda tienen establecido en el área industrial de la ciudad, fue blanco de un nuevo hecho de robo. Allí, autores ignorados sustrajeron en las primeras horas de este domingo el cableado de la bajada eléctrica y el contador para la medición de consumo de energía.
Lo mismo sucedió en cuatro establecimientos que también se encuentran afincados en ese predio industrial de la ciudad cabecera del departamento Caseros, ubicado a la vera de la ruta provincial Nº 92 a unos pocos kilómetros del casco urbano.
El espacio bomberil donde se registró el delito que ya está siendo investigado por la justicia, al igual que el resto de los ilícitos, es utilizado por la institución para capacitar al personal e incluso compartir entrenamientos con cuarteles de localidades vecinas a fin de afianzar conocimientos y técnicas en las intervenciones que suelen realizar ante distintas emergencias.
Así lo indicó la Asociación Bomberos Voluntarios Casilda a través un comunicado donde visibilizó y lamentó lo sucedido.
«Este hecho -señala el escrito- nos entristece y nos disgusta, por tal motivo invitamos a la población a compartir esta publicación, y solicitamos que quienes tengan información se comuniquen al 911 para que podamos recuperar energía eléctrica en nuestro centro de entrenamiento».
Asimismo, indica que «lamentablemente, esta situación también ocurrió en empresas lindantes a nuestro predio de entrenamiento», para finalmente recordar que «en otras oportunidades, también sufrimos la sustracción del alambrado perimetral».
El presidente de la Asociación Bomberos Voluntarios Casilda, Daniel Fraccaro, contó que tomó conocimiento del suceso luego de ser alertado por un guardia de seguridad del predio industrial.
«Cuando llegué al lugar ya estaba trabajando la policía y esperemos que puedan dar con los responsables para esclarecer estos hechos que afectaron tanto a nuestra institución como a cuatro empresas linderas también emplazadas en el área industrial», dijo.
Y al ser consultado su opinión sobre lo ocurrido, Fraccaro sostuvo: «Somos bomberos, pero evidentemente no estamos exentos de situaciones delictivas. Ya sufrimos también otros robos en la parte del tejido perimetral y resolvimos no renovarlo hasta concretar una serie de tareas programadas para mejorar la seguridad del lugar».
Sobre el funcionamiento del centro de entrenamiento, el dirigente explicó que «como este mes no hay prácticas, aprovecharemos el período de receso para poner en condiciones lo que haga falta y así poder retomar las actividades (de capacitación) en febrero” ya sea para bomberos en funciones como aspirante.
«Tenemos que comprar los materiales y hacer nuevamente las conexiones de la bajada eléctrica, mientras que el medidor lo suministrará y colocará sin cargo la Empresa Provincial de la Energía», explicó Fraccaro tras sostener que “no se dan cuenta del daño que le provocan a la institución con el robo de cables para seguramente sacarle el cobre y venderlo en el mercado negro».