Las ceremonias se efectuaron en la Iglesia Catedral y en la plaza 25 de Mayo.

Esta mañana, sábado 7 de octubre, la presidenta del Concejo, María Eugenia Schmuck, presidió los actos con motivo de la celebración del Día de Rosario y su Santa Patrona, la Virgen del Rosario.

La ceremonia se inició en la Iglesia Catedral Basílica Nuestra Señora del Rosario, oportunidad en la que la presidenta del Concejo, Schmuck, junto al director del Liceo Aeronáutico Militar de Funes, comodoro Daniel Clementz, a quienes acompañó el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, colocaron una ofrenda floral, ante la imagen de la Virgen del Rosario.

En dicho acto estuvieron también la concejala Susana Rueda, de Rosario Progresista, y la diputada provincial Clara García, del bloque Socialista.

De inmediato la actividad se trasladó a la plaza 25 de Mayo, donde la concejala Schmuck, junto a dos niños izó la bandera, para entonarse a continuación el Himno Nacional Argentino, interpretado por la Banda “Cabo Teodoro Fels” del Liceo Aeronáutico Militar de Funes.

A continuación efectuó una invocación religiosa el arzobispo monseñor Martín y habló posteriormente la presidenta del Concejo, Schmuck.

De Schmuck

Inició sus palabras la edila Schmuck con un saludo al arzobispo y a los presentes, y sostuvo “una vez más, en este 7 de octubre, donde celebramos a Nuestra Señora del Rosario, y renovamos el compromiso de seguir fundando todas y todos juntos la ciudad que soñamos. Dos celebraciones que son una sola”.

Recordó que la ciudad surgió alrededor del rancho que oficiaba de capilla del curato del Pago de los Arroyos, para evocar que “de aquel hecho tan simbólico y significativo de reunirse en torno a nuestra Santa Patrona, también participó Manuel Belgrano, que oró y pidió al párroco que bendiga la primera bandera, la que vemos flamear hoy en nuestro Monumento, en las escuelas, en los hospitales y en los balcones de muchas casas”.

Aseveró posteriormente que “Rosario es esa historia, una ciudad maravillosa que tiene como signo la rebeldía del gesto patriota que le dio bandera al país”.

Y continuó: “Por eso nuestra Rosario, la que hoy somos, es diferente, porque forjamos una identidad de poblado, sin fecha de fundación pero creyendo en cada uno de sus habitantes. La hicieron grande los pobladores que llegaron a estas tierras y decidieron que sus hijos crezcan en estas calles, quienes apostaron por un negocio familiar que sigue en pie; quienes levantaron un club para los pibes de barrio; quienes abrieron talleres y comercios que le siguen dando trabajo a los rosarinos, que hicieron crecer la industria”.

También precisó que “Rosario es esa historia y este presente: vanguardista, igualitaria, integral, solidaria, talentosa” y entre otros aspectos hizo referencia a que es referente en biotecnología y agroexportación; marcó la “larga tradición en salud pública” y también “cuando llevamos condiciones dignas a espacios públicos y viviendas de barrios que antes no las tenían”.

Destacó a los ex combatientes de Malvinas y su tarea; el talento en los rubros más diversos: médicos, educadoras, deportistas, artistas, músicos.

En otro tramo de sus palabras consignó que “de esa rebeldía, de toda esa fuerza que nos hizo grandes, tiene que salir la unión que necesitamos en estos tiempos difíciles”

Planteó que “parece que nos pocos quieren instaurar una lógica de la violencia. Vemos caer pibes y pibas en manos de las mafias delictivas. Vemos arder el humedal, nuestra flora y fauna, por la especulación y la ambición. Vemos grietas, enfrentamientos, gritos, por la búsqueda insaciable de fama, votos y popularidad”.

Igualmente indicó que “hace mucho tiempo que venimos diciendo que este es el momento de unir. Esto no es una frase vacía es una declaración de principios” y a partir de ello destacó que “el compromiso entonces, es la unión para cuidar a nuestros pibes, la unión para generar oportunidades, la unión para poder salir a la calle tranquilos, la unión para eliminar la violencia y la criminalidad. Pero también tenemos un deber. Ese deber es conseguir la paz”.

En los tramos finales dijo la concejala Schmuck que:  “Por eso, en este día de la Virgen del Rosario, bajo su manto y su espíritu, hagamos de esta festividad religiosa un mandato cívico de unión contra la lógica del enfrentamiento, que tanto daño hace a la vida. Alguna vez lo hicieron los primeros pobladores del Pago de los Arroyos frente a la capilla. Alguna vez lo hizo Belgrano”.

“Tenemos la fuerza y la valentía de cada rosarino y rosarina que ama a esta ciudad y tenemos el futuro de nuestros hijos, hijas, nietos y nietas en nuestras manos. Paz y unión para Rosario”, cerró la presidenta del Concejo.